GRAMÁTICA


SINTAXIS 



La sintaxis es la parte de la gramática que estudia las reglas y principios que gobiernan la combinatoria de constituyentes sintácticos y la formación de unidades superiores a estos, como los sintagmas y las oraciones gramaticales. La sintaxis, por tanto, estudia las formas en que se combinan las palabras, así como las relaciones sintagmáticas y paradigmáticas existentes entre ellas.
Sintaxis estructural.

La sintaxis para Leonard Bloomfield, era «el estudio de formas libres compuestas completamente por formas libres». Central a esta teoría de la sintaxis eran las nociones de clases de forma (form classes) y estructura constituyente. (Estas nociones eran también relevantes, aunque menos centrales, en la teoría de la morfología). Bloomfield definió clases de forma más bien de manera imprecisa, en términos de algún "rasgo fonético o gramático reconocible común y compartido por todos los miembros". Dio como ejemplos las clases de forma que consisten en “expresiones substantivas personales” de la lengua inglesa (definidas como “las formas que, cuando están expresadas con tono exclamatorio final, constituyen requerimientos (llamadas) de la presencia o la atención de una persona”: por ejemplo "John," "Boy", "Mr. Smith."); las clases de forma que consisten en “expresiones infinitivas” (definidas como "formas que, cuando están expresadas con tono exclamatorio final, tienen el significado de una orden: por ejemplo, "run", "jump", "come on"); las clases de la forma de “expresiones sustantivas nominativas” (por ejemplo: "John", "the boys") y así sucesivamente. Debe estar claro, a partir de estos ejemplos, que las clases de forma son similares, aunque no idénticas, a las partes del discurso tradicionales y que una misma forma puede pertenecer a más de una clase de forma.

Sustituibilidad

Lo que Bloomfield tuvo en cuenta como criterio para la pertenencia a clases de forma (y por tanto de equivalencia sintáctica) podría ser mejor expresado en términos de sustituibilidad. Las formas de clase son conjuntos de formas (ya sean simples o complejas, libres o ligadas), de las cuales cualquiera podría sustituirse por otra en una construcción o conjunto de construcciones dadas en todas las oraciones de una lengua determinada.

Constituyentes inmediato

Dentro de las oraciones, las palabras forman agrupaciones jerárquicas llamadas constituyentes sintáticos. Obviamente no cualquier conjunto de palabras forma un constituyente, sino sólo aquellas agrupaciones que realizan una función sintáctica reconocible. En general los constituyentes están formados por constituyentes más pequeños (excepto los constituyentes terminales, que, generalmente, coinciden con palabras, afijos o adposiciones). Las pruebas de constituencia ayudan a identificar cuáles son los constituyentes de una oración.

Lo anterior se puede clarificar con algunos ejemplos. Así, en la frase "pobre Pablo" es una construcción analizable en, o compuesta de, los constituyentes "pobre" y "Pablo". Dado que no hay unidad intermedia de la que "pobre" y "Pablo" fueran constituyentes y que sea ella misma un constituyente de la construcción "pobre Pablo", las formas "pobre" y "Pablo" pueden ser descritas no sólo como constituyentes sino también como constituyentes inmediatos de "pobre Pablo".

Similarmente, la frase "perdió su vida" está compuesta de tres palabras-forma ("perdió", "su" y "vida") de las cuales todas podrían describirse como constituyentes de la construcción. No todos esos constituyentes, empero, son sus constituyentes inmediatos. Las formas "su" y "vida" se combinan para hacer la construcción intermedia "su vida"; es esta unidad intermedia la que se combina con "perdió" para formar la frase más amplia "perdió su vida". Los constituyentes inmediatos de "perdió su vida" son "perdió" y "su vida"; los constituyentes inmediatos de "su vida" son las formas "su" y "vida". Por estructura constituyente de una frase u oración se entiende la organización de sus más pequeñas formas de las cuales se compone (sus constituyentes últimos) en capas de unidades sucesivamente más incluyentes. Vista de esta manera, la oración "Pobre Pablo: perdió su vida" es más que simplemente una secuencia de cinco palabras asociadas con un modelo de entonación particular. Es analizable en sus constituyentes inmediatos y así sucesivamente, hasta que, en el último paso del análisis, los contituyentes últimos de la oración son alcanzados. La estructura constituyente de la oración completa se representa por medio del siguiente esquema:

[Pobre Pablo] [perdió [su vida] ]
Cada forma, sea simple o compuesta, pertenece a una clase de forma. Usando letras arbitrarias seleccionadas para denotar clases de forma del español, "pobre" puede ser un miembro de clase de forma A, "Gonzalo" de la clase B, "perdió" de la clase C, "su" de la clase D y "vida" de la clase E. Dado que "pobre Gonzalo" es sintácticamente equivalente a (o sea, sustituible por) "Gonzalo", se ha de clasificar como un miembro de A. Así lo es también, puede asumirse, "su vida". En el caso de "perdió su vida" sí hay un problema. Hay muchas formas (incluyendo "perdió", "repartió" y "exportó") que podrían ocurrir, como aquí, en construcciones con un miembro de B y que también pueden ocurrir solas; por ejemplo, "perdió su vida" es sustituible por "exportó la cocaína", ya que "exportó" es sustituible por "perdió" y "la cocaína" por "su vida". Siendo así esto, se podría decidir clasificar construcciones tipo "perdió su vida" como miembros de C. Por otra parte, hay formas que —aunque sean sustituibles por "perdió", "repartió, exportó" y así sucesivamente cuando estas formas ocurren solas— no pueden ser usadas en combinación con un miembro siguiente miembro de B (cf. "murió", "existió"); y hay formas que, aunque puedan usarse con un siguiente miembro de B, no pueden ocurrir solas (cf. "poseyó"). La pregunta es si se respeta o no la distinción tradicional entre las formas de verbo transitivas e intransitivas. Podría decidirse, así, que "perdió", "repartió", "exportó", etc. 

ORACIÓN

La oración es el constituyente sintáctico independiente más pequeño capaz de informar o expresar por medio de un idioma la realización de un enunciado, esto es, revelar con palabras el contenido de una proposición lógica, un mandato, una petición, una pregunta o, en general, un acto ilocutivo o de habla que incluya algún tipo de predicado o desarrollo sintáctico estructurado y completo, como por ejemplo en “Ese profesor ha enseñado bien la gramática a sus alumnos”. Se efectúa en un contexto y situación determinados y, con frecuencia, con el apoyo de otros códigos de signos no lingüísticos concurrentes, como los gestos.

Según la fonología, las oraciones están delimitadas prosódicamente por pausas y una entonación determinada. La pausa inicial suele señalarse en la escritura con una mayúscula y, la final, con un punto o, más raramente, con coma o punto y coma.

Se diferencia de las frases en su completitud descriptiva y en que poseen estructura compleja o analítica, ya que expresiones como ¡alto!, buenos días, sí, no y las llamadas proformas poseen un sentido completo, pero no pueden denominarse oraciones a causa de su estructura simplificada o sintética o de su carácter sustitutorio.

Por otra parte, se usan a veces también los términos cláusula, suboración, proposición (no en sentido lógico, sino gramatical) o nexus para designar un constituyente sintáctico semejante a la oración en su estructura, pero dependiente sintácticamente (las más de las veces a través de un nexo) de otra unidad oracional mayor en que se inserta o con la que se une o ayunta, respecto a la cual carece también de independencia semántica y fonológica, como en “Ella me dijo que ese profesor había enseñado bien la gramática a sus alumnos”, donde el nexo “que” une y subordina a la cláusula posterior (“...ese profesor [...] alumnos”) la anterior (“Ella me dijo...”) formando una unidad superior compuesta de ambas cláusulas (o proposiciones, suboraciones, nexus) denominada por esto “oración compuesta”. Esta falta de autonomía es la principal diferencia de la cláusula, suboración, proposición o nexus respecto de la oración, que es una unidad completa e independiente, ya que la cláusula necesita o reclama relacionarse con otras cláusulas dentro de la oración compuesta y principal.

Una definición más tradicional y didáctica, pero más imprecisa, es la de que «oración es el conjunto de palabras que tiene sentido completo y autonomía sintáctica». Su fin es destacar el hecho de que la oración, práctica- o pragmáticamente, es el fragmento más pequeño del discurso que comunica una idea completa y posee autonomía e independencia (es decir, podría sacarse del contexto y seguir comunicando).

Debe tenerse en cuenta que, técnicamente, términos como enunciado, proposición y oración no son completamente sinónimos, ya que el primero se refiere más a aspectos pragmáticos, el segundo más a lógicos y semánticos y solo el último a puramente gramaticales. 


EL PÁRRAFO





El párrafo es una estructura gramatical.  Se define como párrafo todo aquel grupo de oraciones que tienen en común un propósito o idea central.  Algunas veces el párrafo es toda la composición; otras, la composición es un conjunto de párrafos.  Si la composición tiene un párrafo solamente, sus especificaciones son distintas a cuando la composición tiene más de un párrafo. 
En una noticia, en un artículo, en un informe, en un ensayo, en una novela y en un cuento, hay un conjunto de párrafos.  Es más, en cualquiera podemos encontrar párrafos de distintos tamaños y propósitos.  La distinción principal de cualquier párrafo en una composición de más de un párrafo es que la interpretación de la idea central o tema principal de estas composiciones depende de la lectura y comprensión de las ideas desde la primera letra hasta el punto final.  Aunque podamos resaltar algunos párrafos de una composición como en una noticia, un ensayo o una novela, la realidad es que la interpretación no descansa nunca en la comprensión de ese extracto del texto.  La comprensión del texto requiere la lectura cabal de todo lo escrito bajo ese mismo tema que, usualmente, se distingue por un título en particular.
Párrafos expositivos, argumentativos, narrativos y descriptivos
Hemos leído y analizado párrafos que tienen distintos propósitos: expositivos, argumentativos, narrativos y descriptivos.  Cuando un autor o autora define un tema o una idea, usualmente utiliza párrafos expositivos.  En este tipo de párrafos, el autor o autora aclara su idea a través de la presentación de una definición, de la discusión de datos o hechos (por ejemplo históricos, sociales, económicos), de la utilización de ejemplos de su experiencia o de experiencias conocidas.
Es frecuente que la discusión de una idea presente dos o más posturas o puntos de vista diferentes sobre un mismo tema o asunto.  Si es así, el autor o autora tiene que atender en el desarrollo de su composición que su pensamiento o idea no necesariamente se acepta por todo el mundo.  Por lo tanto, se redactan párrafos argumentativos.  Los párrafos argumentativos expresan claramente el punto de vista de su autor o autora ante un tema.  Además, justifican el punto de vista de su autor o autora a través de la comparación y contraste de ideas de otros autores.  Es decir, se explican datos o eventos, pero se interpretan estos datos o eventos de manera particular de acuerdo con el autor o autora.  Todos los ejemplos, los argumentos, los datos, los hechos, las experiencias en un párrafo argumentativo contestan por qué la postura o punto de vista del autor o autora es más adecuado o más certero.  
Los párrafos narrativos tienen como propósito relatar la secuencia de ciertos sucesos.   Todo lo que transcurre en un tiempo y en un espacio a algo o alguien se expresa a través de párrafos narrativos.  Su propósito es que el lector-receptor comprenda una causa y un efecto; un principio y un final; un origen y un destino.  A través de los párrafos narrativos, los lectores-receptores logran interpretar ciertas secuencias, la evolución de un asunto o problema, el desarrollo de un evento, las consecuencias de ciertas acciones o los resultados de la combinación de ciertas condiciones, factores o elementos.
Por último, un párrafo descriptivo presenta a través de las palabras la capacidad senso-motora de un ser humano.  Un párrafo descriptivo potencia el uso de la palabra y presenta una imagen sensorial ante los lectores-receptores.  A través de un párrafo descriptivo, un autor o autora utiliza todos sus sentidos para delinear los atributos de los objetos y sucesos percibidos.  Mientras más detalle el autor o autora los sentidos utilizados en su delineamiento de lo percibido, mejor será la imagen del lector-receptor sobre lo descrito.   La superioridad de un escritor o escritora reside en cuán eficientemente provoca todos nuestros sentidos para que percibamos, a través de la palabra, un objeto, un suceso, un evento, una situación.
En cualquier composición en formato de párrafo, un autor o autora puede utilizar párrafos expositivos, argumentativos, narrativos o descriptivos para el desarrollo de su tema o idea central.  






No hay comentarios:

Publicar un comentario